viernes, 25 de octubre de 2013

The Embodiment of Mind. Gerald Edelman 2006 y 2012. El enfoque científico de la conciencia

La idea de embodiment no aparece muy perfilada en este trabajo, aunque contiene algunas referencias interesantes como veremos.

La reflexión final me resulta algo oscura: se refiere a la posibilidad de "an artificial embodiment of mind", es decir, un artefacto cosnciente que no tendría nuestro cuerpo, pero no por ello "will neither destroy nor challenge the uniqueness of our phenomenal experience" (p. 21). ¿Significa que el artefacto consciente poseerá un experiencia fenoménica diferente de la nuestra, y que ésta no se verá amenazada y seguirá siendo propiamente humana? ¿El escenario sería el de dos tipos de seres conscientes mentalmente diferentes?
Esto me lleva a pensar en "la cuestión de la diferencia" o del umbral de relevancia -como lo llamo en otras partes- en el debate sobre la mente extendida: ¿Qué nivel y qué tipo de semejanza habría entre la "corporeización" artificial de la mente y la nuestra?

El objetivo del autor es considerar la conciencia desde un punto de vista científico y no filosófico, ofreciendo una teoría de la conciencia basada en los avances neurocientíficos.
El enfoque de Edelman viene delimitado, por una parte, por una definición de mente más bien restringida, tomada de un diccionario (Webster´s Third International Dictionary): la mente entendida como "la suma total de los estados conscientes de un individuo", y por otra, por un compromiso filosófico naturalista que remite expresamente a Quine: la mente es un estado del cuerpo.

El problema mente-cuerpo planteado en términos dualistas supone enfrentar la pregunta ¿Cómo podría surgir la mente en el orden material? Dejando aparte orientaciones idealistas, Edelman interpreta que la cuestión crucial es cómo explicamos la conciencia en términos corpóreos ("in bodily terms").

Para tratarse de una aproximación que expresamente evita la filosofía el punto de partida no resulta muy ajeno a la filosofía. La conciencia es un proceso (no una cosa) que presenta tres características fundamentales -que deben ser científicamente explicadas, lo que equivale a enternderlas en términos cerebrales y corporáles:
- El aspecto qualitativo de la experiencia (la cuestión de los qualia)
- La causación mental.
- La intencionalidad.

La propuesta de Edelman asume la premisa de que "la conciencia es experimentada en términos de un relación triádica entre el cerebro, el cuerpo y el medio ambiente" (p. 13). Una declaración que pertenece al tipo de afirmaciones que debe ser considerado detenidamente desde el punto de vista de la temática de este blog.

miércoles, 9 de octubre de 2013

NUEVAS OBJECIONES

 Jakob Hohwy presenta hoy en la Universidad de Edimburgo una interesante objeción a las tesis de la mente extendida basada en una concepción del cerebro que está alcanzando notable difusión. Este es el resumen de su intervención

Abstract: The most exciting theory in neuroscience is that the brain is an organ for prediction error minimization (PEM). This theory is rapidly gaining influence and is set to dominate the science of the mind and the brain in the years to come. PEM has extreme explanatory ambition, and profound philosophical implications. Here, I assume the theory, briefly explain it, and then I develop the idea that PEM implies that the brain is essentially self-evidencing. This means it is imperative to define an evidentiary boundary between the brain and its environment. This boundary defines the mind-world relation, opens the door to global skepticism, and makes the mind transpire as more inferentially secluded and neurocentrically skull-bound than many would nowadays think. PEM's strongly neurocentric character means it deflates contemporary hypotheses that cognition is extended and embodied, but in spite of this it can accommodate the kinds of cases that fuel these hypotheses.